Víctor Valdés va camino de convertirse, si no lo es ya, en el mejor portero de la historia del Barcelona. A pesar de contar sólo 29 años, atesora unos registros y unos números dignos de un veterano. Además, el rol en el equipo ha ido creciendo progresivamente hasta llevarle a ser uno de los capitanes del mejor Barça de la historia. Las frías estadísticas son un claro exponente de su calidad y su aportación a un equipo que lo ha ganado todo en las últimas temporadas.
Es el portero del Barcelona que más partidos de Liga ha disputado (306) y también el que más encuentros oficiales ha disputado (424), superando a leyendas como Zubizarreta, Ramallets, Sadurní o Artola. Además, ha logrado acabar con el permanente debate que existía en el Camp Nou desde que Zubi se retiró. Tras unos primeros años soportando críticas, su juego se serenó y ya nadie discute que debe ser el meta titular del equipo. De hecho, es parte fundamental en el inicio del juego azulgrana.
No obstante, no lo tuvo fácil. Van Gaal, que fue el técnico que le dio la oportunidad con apenas 20 años (temporada 2002-03), estuvo a punto de echarle del club. Ahí ya se vio el fuerte carácter del cancerbero, una de sus virtudes junto con su profesionalidad a la hora de preparar los partidos. Tras relegar al banquillo a Roberto Bonano, el técnico holandés le mandó de nuevo al filial, que estaba en Segunda división B. Valdés no sólo no se presentó al partido que tenía que jugar, sino que decidió no ir a entrenarse. Después de tres días de incertidumbre, Joan Gaspart tuvo que intermediar ante lo que Van Gaal consideraba un gravísimo acto de indisciplina. Los malos resultados, que provocaron la destitución del holandés y la llegada de Radomir Antic, fueron decisivos para que Valdés regresara al primer equipo.
Tras conseguir cuatro trofeos Zamora, está en buena disposición para ganar el quinto e igualar a Ramallets, el único guardameta que ha logrado alcanzar esta cifra. Por el camino va batiendo récords. Ya es el cancerbero de la historia del Barça con más minutos consecutivos sin recibir un gol. El tanto de Ander Herrera en San Mamés el pasado domingo detuvo el reloj en los 886 minutos, superando en 62 el anterior registro de Miguel Reina. Valdés es el portero total: bueno por arriba, en el uno contra uno, en el juego de pies y en colocación. Una garantía absoluta.
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