El portero Roberto Jiménez, que viene siendo el mejor jugador del Real Zaragoza desde el inicio de temporada, hizo ayer examen de conciencia y reconoció que si el equipo no es capaz de recuperar el nivel mostrado al comienzo de la Liga será difícil que se consiga la permanencia en Primera División. "Yo ánimo a mis compañeros a que se pongan el vídeo de los partidos ante la Real, el Espanyol o el Villarreal y que realmente vean que podemos hacer las cosas bien y que sabemos hacerlas bien. Nosotros debemos ser valorados por lo que hemos hecho bien y mantener ese nivel durante lo que resta de año", dijo Roberto, quien añadió: "Esa es la única manera de salir de esta situación y si no lo hacemos nos iremos a Segunda".
El meta zaragocista considera que ahora no sirve de nada lamentarse sobre lo que han podido hacer mal y que deben reaccionar de inmediato para sacar al Zaragoza del último puesto. "No podemos estar pensando siempre en porqué hemos llegado hasta aquí o en lo malos que somos, porque entonces no vamos a salir de abajo y en febrero vamos a estar en una situación imposible de darle vuelta. Nosotros no somos el equipo que ha jugado la primera parte del Calderón o del Mallorca ni esos jugadores. Por eso nos tiene que doler que la gente nos catalogue por esos partidos. Hemos tocado suelo y ahora no hay nada más debajo", afirmó Roberto Jiménez.
"Siempre hay solución mientras sea posible", aseguró Roberto, que opina que quizás ha llegado el momento de que el equipo se libere de los complejos que pueden atenazarles por ocupar el farillo rojo. "No puede haber una situación peor y quizás sea el momento de soltarnos, de ver que según están las cosas peor no puede ir. Nuestro objetivo es ir creciendo poco a poco y empezar de cero para mejorar. Debemos cambiar la imagen y conseguir puntos para meternos en el lío", comentó el portero, quien añadió: "Ahora en lo único que pensamos es en seguir en la Copa".
LA FIGURA DEL ENTRENADOR Como siempre, los malos resultados del equipo han puesto en el disparadero a Javier Aguirre, pero Roberto no cree que eso sea justo. "En estas situaciones al final siempre sale la figura del entrenador, pero eso pasa siempre, lo sabemos todos, a pesar de que los responsables seamos los jugadores. El momento es delicado para todos y también para el míster. Nadie es de piedra, pero además de profesionalmente, personalmente es una persona fuerte y lo sigue siendo. Esta situación nos duele a todos", dijo el meta.
Fuente: www.elperiodicodearagon.com
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