Tres son multitud y en la portería del Real Zaragoza lo viene siendo desde la llegada de Roberto Jiménez. Una incorporación que, además de la polémica formada por el elevado precio de la operación publicado por los clubes, trajo consigo una de las muchas incertidumbres del verano que debía resolver la entidad. Por el momento, a falta de doce días para el cierre del mercado, continúa sin novedades. Leo Franco o Toni Doblas deben abandonar el barco por la imposibilidad de contar con tres porteros de alto salario en un equipo en concurso de acreedores.
Como se dijo desde el principio, la entidad prefiere a Doblas por su condición de hombre fuerte en el vestuario y por su menor salario. Por otro lado, Javier Aguirre ha confiado siempre más en Leo Franco en los momentos difíciles. Con el paso de los días, el técnico mexicano ha dejado claro que su titular en estos momentos es el madrileño Roberto. Eso sí, saca el capote cuando tiene que decidirse por el andaluz o el argentino. Más bien, no da pistas y se plantea ante todos un trato igualitario, también con Pablo Alcolea que se ejercita ya con el filial.
En la sesión matinal, en la que las grandes ausencias han sido Obradovic y Edu Oriol con permiso del club, además de Kevin Lacruz que se ha entrenado con el filial, Aguirre ha trabajado mucho los tiros a puerta, obligando a lucirse a cada guardameta. Los tres saben lo mucho que se están jugando, la titularidad por un lado o la salida del club por otro. Se nota en sus gestos, de rabia cuando les marcan, y de máxima autoexigencia en cada minuto del entrenamiento. En rueda de prensa, el protagonista ha sido Roberto Jiménez, que ha dejado claro que “en lo que respecta al día a día está siendo una situación muy cómoda porque da gusto trabajar con gente como Toni y Leo”.
Y es que a pesar de la gran competencia existente, el buen ambiente entre los guardametas es la tónica habitual. El madrileño ha recordado que la intención de cada uno es imponerse sobre los otros para entrar en el once titular y que los tres trabajan “para jugar y ninguno va a tirar la toalla y a dar nada por hecho para bien o para mal, lo que ayudará a aumentar el nivel”. Roberto es consciente de que la portería “es un puesto muy particular y muy complicado en algunos momentos de la carrera”.
Fuente:www.aragondigital.es
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