De Gea había mostrado una solidez y asombrosa sangre fría bajo palos pese a su juventud (ahora tiene 21 años) en España, pero pronto mostró otra cara en la Premier. Su técnico, Alex Ferguson, lo defendió en rueda de prensa, pero la realidad es que, después del fallo contra el Liverpool, había sacado a calentar al otro guardameta como advertencia al español.
Ciertamente, el guardameta de Illescas no comenzó su andadura en el Manchester United con buen pie. Aún en el mes de septiembre, terminó en comisaría por un malentendido en un supermercado, donde pensaron que estaba robando un dónut. Un mes antes, en la Community Shield, un error suyo propició el gol de Edin Dzeko para el eterno rival, el City, aunque finalmente los 'red devils' pudieron remontar en el marcador.
El fichaje de David De Gea por el club de Old Trafford dejaba el pasado verano huérfana una portería, la del Atlético, que había defendido con sobrada solvencia. Aunque pronto el belga Courtois taparía este hueco para la afición, pese a su condición de cedido, aunque ésa es otra historia. El caso es que De Gea había mostrado una solidez y asombrosa sangre fría bajo palos pese a su juventud (ahora tiene 21 años) en España, pero pronto mostró otra cara en la Premier.
Para empezar, el cometido que se le encomendaba en un principio era, cuando menos, hercúleo: continuar la labor de una leyenda viva del United, Edwin Van der Sar, con el que por guardar un apreciable parecido físico no se le debería atribuir una suerte de destino similar. Su temprano fallo en la Community Shield empezó a avivar el runrún de Old Trafford. Más aún cuando en octubre, con el toledano bajo palos, el United sufría ante el City la derrota más humillante en décadas: 1-6 en el marcador.
Lejos de seguir una progresión de mejora, el día de Nochevieja De Gea volvía a errar y además en dos ocasiones: una salida fallida tras un córner y un disparo que se coló bajo sus piernas propiciaron dos goles que dieron la victoria por 2-3 al Blackburn Rovers, que era colista. Esta derrota impidió al United colocarse como líder en solitario.
Problemas de visión
La prensa inglesa se hacía eco de estos fallos y en enero, 'The Guardian' aseguraba que los 'red devils' habían pedido al portero que se operase de la vista, ya que De Gea usa lentillas y su salud ocular podría estar interfiriendo en su juego. También entonces De Gea hacía unas declaraciones en la revista 'Inside United' en las que trataba de explicar las claves de estos errores: "El estilo de juego en la Premier es más físico que en la Liga. Además, tengo que estar perfectamente colocado y atento durante todo el partido, ya que los atacantes pueden disparar desde cualquier ángulo y desde cualquier distancia. Además, hay muchos balones cruzados desde las bandas, así como balones por alto y gran cantidad de juego aéreo".
La última cantada de De Gea se produjo el pasado fin de semana en la FA Cup: esta vez se tragó un cabezazo de Agger tras un saque de esquina. Después de esto, el guardameta se convirtió tristemente en 'trending topic' de Twitter y las críticas en prensa se cebaron con él. Su técnico, Alex Ferguson, lo defendió en rueda de prensa, pero la realidad es que, después de este fallo, había sacado a calentar al otro guardameta, el danés Peter Lindegaard, como advertencia al español. Después de esto, su compañero Michael Owen salió en su defensa en Twitter, pidiendo paciencia a la afición y recordando la juventud del portero. Además, Owen quiso dejar patente que, en el gol del Liverpool, al menos seis jugadores habían tapado la visión de De Gea antes del testarazo letal.
En el último encuentro del United en la Premier League, ante el Stoke City, Ferguson ha tirado sorprendentemente del tercer portero como titular. Los motivos oficiales: baja de Lindegaard por lesión y del arquero español por enfermedad (pese a que se encontraba viendo el partido desde la grada). El resultado: 2-0 a favor y el United se coloca líder... con otro bajo palos. La pesadilla de David De Gea continúa.
Fuente: www.marca.com
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