Tras levantar con sus propias manos la Copa del Mundo que acreditaba el premio a la mejor selección nacional de fútbol, el capitán de La Roja ya tiene su trofeo individual. Iker Casillas se desplazó a la sede central de Adidas, en la ciudad alemana de Herzogenaurach, para recoger el Guante de Oro, trofeo que le acredita como el mejor guardameta del pasado Mundial, celebrado en Sudáfrica. Casillas recoge así el relevo de Buffon, último portero en recibir este premio en el Mundial del año 2006.
Lo cierto es que la actuación que le ha valido este premio al guardameta español fue esencial para que la Selección Española consiguiera llevarse el Mundial. El guardameta del Real Madrid tan solo recibió dos goles en todo el campeonato, tantos encajados ante Suiza y Chile, pero más importante todavía fueron sus actuaciones evitando tantos vitales que podrían haber dejado en a España en la estacada. En el recuerdo de los seguidores españoles quedarán las imágenes de su estirada para detener un penalti ante Paraguay que podría haber supuesto la eliminación de La Roja viendo el planteamiento que había propuesto el equipo sudamericano.
El Mundial cumplió sus metas
"Es una gran satisfacción recibir este premio. Es la manera perfecta para redondear una temporada 2010 con triunfos insospechados. Espero que el éxito continúe en el 2011", declaró el guardameta, visiblemente orgulloso de los éxitos conseguidos.
"Agradezco mucho el premio porque al ganar la Copa del Mundo se cumplieron metas que tenía. Soñaba con ello desde pequeño y cuando vi a Dunga, Cafú, Zidane o Cannavaro levantar la Copa creía que sería casi imposible lograrlo, pero al final lo conseguimos", añadió Casillas en la web de su club.
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