Entrevista en el diario AS a uno de los mejores guardametas de la Liga, Diego Alves no quiere protagonismo. Afirma no tener ningún secreto infalible, pero aclara que aguantar es clave para tener éxito en los penaltis.
¿Lleva la cuenta de los penaltis que ha parado desde que llegó a España?
Tengo amigos que me lo recuerdan, así que no me queda más remedio (risas). De 16 que me han tirado he parado nueve y dos han ido fuera. Son números buenos, pero llegará el momento en el que la gente tenga ganas de meterme los penaltis y comiencen a entrar.
Su última víctima es Kanouté, al que ya le ha parado dos, ¿en éste sabía hacia dónde iba a tirar?
Con seguridad no. Es algo impredecible puesto que dentro de un partido cada delantero puede elegir hacia donde tirar en el último segundo. Pueden pasar muchas cosas. Hay infinidad de posibilidades. Pero sí es cierto que Kanouté tiene mucha costumbre de tirar hacia el sitio donde al final lo paré. Esperé el máximo tiempo posible antes de lanzarme porque sé que él hace una paradinha corta. Cuando la terminó, yo seguía de pie y, al hacer el movimiento, yo sabía que iba a ir ahí.
¿Les ha venido bien a los porteros que se prohíba la paradinha?
En una portería tan grande como la de fútbol desde una distancia tan corta da igual. Tienen muchos metros hacia donde tirar, hagan paradinha o no. Pero en algunos casos sí que beneficia. En Brasil, por ejemplo, se permite que incluso pases la pierna por encima del balón y se puede fingir el lanzamiento para que el portero caiga vencido y luego disparar. Así es más complicado.
El parapenaltis de la Liga debe tener algún secreto.
No, de veras que no hay ninguno. Depende del partido, del jugador que lance el penalti son muchos condicionantes. Lo que hay que hacer es esperar hasta que tengas claro o imagines dónde puede ir el penalti.
¿Si tuviera que lanzarse un penalti a sí mismo, hacia dónde chutaría?
Hacia fuera. A mí nunca me marcaría un gol, lógicamente (risas).
Fuente: www.as.com
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