La edad es relativa. En el DNI la marca un número, mientras que la real la cifran las sensaciones. Andrés Palop, que cuenta desde el pasado lunes 39 años, proyecta una bastante inferior. Según el malogrado Piotr Trochowski, “de 18”. El trabajo diario y los cuidados que dedica para consigo mismo le están permitiendo no sólo alargar su carrera deportiva, sino ser incluso titular en el club con el que mejor ha rendido, un Sevilla que le instó a marcharse en verano y que trajo para su meta a alguien muy contrastado, Diego López.
Desde que el gallego fuese expulsado en Granada, en la jornada 2, saltó la sorpresa, auspiciada por la confianza de Míchel, quien debería de ver bastante mal a Palop para volver a relegarle a la suplencia. De este modo, el ex del Valencia comienza a preguntarse si el club le ofrecerá una propuesta de renovación. ¿Por qué no?
Para pensar así, Palop no sólo tiene el argumento de su propio rendimiento, sino que puede encontrar otros ejemplos de porteros veteranos si alza un poco su vista. En la Premier League inglesa, por ejemplo, hay varios: Brad Friedel (41) y Carlo Cudicini (39), ambos del Tottenham; Mark Schwarzer (40, Fulham) o Mike Pollitt (40, Wigan Athletic). En la liga escocesa, igualmente, la nómina de porteros que sobrepasan los 38 años es interesante: Neil Sullivan (42, Doncaster Rovers), Rab Douglas (40, Dundee FC) o Steve Banks (40, Dundee United).
Más conocidos, la amplia mayoría con muchos encuentros como internacionales a sus espaldas: Rogerio Ceni (39, Sao Paulo), Oswaldo Sánchez (39, Santos Laguna), Óscar Pérez (39, San Luis), Faryd Mondragón (41, Deportivo Cali), Woon-Jae Lee (39, Chunnan Dragons), Essam El Hadary (39, Al Merreikh), Sander Boschker (42, Twente), Ulrich Ramé (40, Sedan) o Juan Carlos Henao (40, Once Caldas). Palop lo tiene claro: “Si el Sevilla me ofrece seguir, lo miraremos”.
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