LA PORTERIA DEL REAL BETIS NO TIENE DUEÑO

A menos de dos semanas para que el Betis debute en Liga, ante el Athletic en San Mamés, la portería verdiblanca aún no tiene dueño. De hecho, este verano está teniendo lugar una batalla por la titularidad que no pudo tener hace un año. Entonces, Fabricio se lesionó de gravedad durante la pretemporada, dejando en bandeja la titularidad a Casto, quien también se aprovechó de que Goitia no contaba. Así, el extremeño fue indiscutible hasta la jornada 22, perdiéndose sólo el choque de la sexta fecha por sanción. Mientras, su compañero reapareció en Copa, contra el Córdoba, pero volvió al dique seco a la media hora del duelo de vuelta. De este modo, el exrecreativista tuvo que esperar hasta febrero para debutar en Liga, haciéndolo frente al Athletic en el Villamarín. A partir de ahí, no salió del once hasta los dos últimos partidos, que volvieron a ser para Casto. Sin embargo, el balance global de ambos no arroja grandes diferencias. No en vano, es cierto que el pacense estuvo más minutos sobre el campo, 1960, jugando más duelos, 22, y recibiendo más tantos en contra, 33. Pero esos números resultarían muy similares a los que, de seguir la misma progresión, habría alcanzado su compañero si hubiese disputado el mismo número de envites. Basta pensar que, en ese caso, las 24 dianas que recibió el de Las Palmas serían en 31, sólo dos menos. Eso sí, Fabricio actuó en cinco duelos menos en Liga que su rival, lo que no le impidió que su saldo de puntos fuese casi el mismo, quedando 23 a 24 a favor del extremeño.Pero esta dinámica tan pareja se ha mantenido, incluso, durante este verano. Pese al sistema de rotaciones impuesto por Mel en la portería, los dos han jugado tres partidos completos. No obstante, el canario ha tenido que sacar el balón del fondo de su portería en dos ocasiones, ambas el pasado domingo, frente al Hoffenheim. Además, la segunda vez vino propiciada por un error suyo, al no atajar un centro bombeado. Por su parte, Casto ha recibido cuatro tantos, si bien es verdad que los dos últimos han sido de penalti, ante el Stuttgart. Sea como fuera, tanto uno como otro cuentan todavía con algo menos de dos semanas por delante para convencer al míster de que merecen hacerse con el puesto, convirtiéndose así en los propietarios de una meta que aún no tiene dueño. Fuente: www.estadiodeportivo.com