El próximo 20 de abril, en la finalísima de la Copa del Rey ante el Real Madrid, jugarán Pinto y diez más. A día de hoy, eso es lo que se puede asegurar sin temor a equivocarse. Pep Guardiola ya dejó claro hace unos días que el gaditano sería el portero titular del equipo en caso de que el Barça eliminase al Almería y se plantase en la gran final. Una vez alcanzado el objetivo, y a pesar de lo que dijo Guardiola, desde diferentes foros se ha reactivado el debate de si Pinto debe jugar en un partido de tal calibre. Es un debate muerto.
La afición es libre de opinar y de debatir, eso está claro. Hasta ahora, el 'Pep Team' siempre le ha ganado al Madrid (ya va una 'manita' de victorias ante los blancos con Guardiola en el banquillo), pero con Víctor Valdés bajo palos. Ahora, la posibilidad de afrontar un encuentro a vida o muerte sin el portero catalán como titular y con su suplente habitual en el campo tiene algo preocupados a algunos culés. Se espera que Mourinho y los suyos afronten el partido con el cuchillo en los dientes y hay barcelonistas que no son partidarios de hacer concesión alguna, aunque Pinto haya sido siempre el portero de la Copa.
Sin embargo, Guardiola tiene más información que nadie de cómo funciona el equipo y ya ha tomado la firme determinación de mantener al gaditano en la final. No hacerlo sería traicionar la política que ha llevado hasta ahora, una decisión que podría producir alguna grieta en el espectacular ambiente que se vive en la caseta. El grupo -y no es un tópico- es una auténtica piña cuya unidad se ha forjado a base de triunfos, pero también de situaciones en que todos los futbolistas, incluidos los menos mediáticos, han sido decisivos. Y ni Pep ni sus futbolistas olvidan que con Pinto se ganó la Copa del Rey del 2009 en Mestalla. Una edición en la que el andaluz fue vital cuando, en la vuelta de las semifinales, le detuvo un penalti al mallorquinista Martí en el entonces llamado Ono Estadi de Palma.En la presente edición, Pinto también ha tenido actuaciones de una importancia crucial. En la ida de los cuartos, ante el Betis en el Camp Nou, el del Puerto de Santa María sacó un par de manos milagrosas. Y eso tampoco lo olvida el vestuario, empezando por Pep. Un vestuario en el que Pinto es uno de los más queridos.
Veterano (35 años) y con una calidad innegable (fue Trofeo Zamora con el Celta en la Liga 2005-06), además es un tipo divertido que ha hecho muy buenas migas con la mayoría de compañeros, y especialmente con Messi. Tanto se le quiere ahí dentro que acaba contrato en junio y renovará.
Fuente: www.elmundodeportivo.com
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